Desconfió hasta los huesos de los siempre contentos, prefiero bellezas sin tanto espamento. Si buscas un amor elegante no cuentes conmigo, hay noches muy bravas cuando uno anda herido. Y si digo que voy a cuidarte mírame torcido, tengo la costumbre de romper los bolsillos, jodida costumbre de arruinar lo querido.